#8M2021

¡Contra el virus del

patriarcado y el

capitalismo.

La vacuna: el feminismo

y la solidaridad!

IDEAC comparte el llamado de acción global de la Vía Campesina.

Este 8 de marzo de 2021, articuladxs en nuestra diversidad y en una sola voz afirmamos ¡contra el virus del patriarcado y el capitalismo; la vacuna: del feminismo y la solidaridad! a la vez que resaltamos el rol fundamental de las mujeres del campo y del campesinado em su conjunto, como primera línea en la producción de alimentos agroecológicos y saludables que sustenten la vida, y representan entre el 60 y 70 por ciento de la producción mundial.

Al cumplirse 25 años de la construcción colectiva de la soberanía alimentaria, esta es nuestra vía concreta y sostenible frente a las distintas crisis que hoy vivimos. Necesitamos acabar con la violencia sistémica del capitalismo y del patriarcado que hoy vulneran principalmente los derechos de las mujeres, diversidades, de la niñez y la clase trabajadora excluyéndoles incluso del acceso público y gratuito a una vacuna que debería ser considerada, como la alimentación, un derecho humano. Tal como lo defenderemos en nuestro llamado internacional por el derecho a la Salud Pública gratuita para todas las poblaciones.

En el mundo, el rol político, social y económico de las mujeres es vital, más aún en medio de esta pandemia, y seguimos recibiendo salarios más bajos, informales, precarizados, somos explotadas, migrantes, madres solteras, trabajadoras agrícolas, pescadoras, pastoras que tenemos menor acceso a la tierra, a la tecnología y a las políticas públicas de salud, protección contra la violencia, educación y cultura.

El mayor obstáculo al que nos enfrentamos en el campo es a la falta de acceso a medios de producción como la tierra. En el mercado apenas poseemos el 1% de las tierras y aún así tenemos el reto de seguir garantizando la alimentación y cuidado de comunidades, familias y del mundo en condiciones de desigualdad política, económica y social.

En esta jornada también exigimos a los Estados implementar la Declaración de las Naciones Unidas sobre Derechos Campesinos y de otras personas que trabajan en zonas rurales (UNDROP, por sus siglas en inglés), donde se reconoce a las mujeres y al campesinado como sujetxs de derecho. Esta Declaración de la ONU es un instrumento estratégico para fortalecer las luchas y propuestas de los movimientos rurales. Además, sienta una jurisprudencia internacional para orientar la legislación y las políticas públicas en todos los niveles institucionales en beneficio de quienes alimentan al mundo.

El modelo del agronegocio imperante está estandarizado por el poder económico de la agroindustria. Son las grandes corporaciones multinacionales las que controlan qué se va a producir, qué comemos, cuánto comemos y el precio de lo que comemos. Hacen lobbys con los gobiernos e incluso con organismos multilaterales, tal como hemos venido denunciando con la Cumbre de la Alimentación organizada por la FAO para este año, y cuyo objetivo es seguir acaparando aún más el mercado de la alimentación. Esta dinámica genera altas ganancias para las corporaciones y costos gravísimos para la salud de las sociedades y del planeta.

A lo largo de la historia, la mujeres luchamos por ser sujetas de transformaciones, de movilización y concientización. Desde La Vía Campesina saludamos todas las luchas y compañeras que resisten en la India, Colombia, Chile, Venezuela, Cuba, Kurdistán, Palestina, las Zapatistas, la mujeres diversas organizadas en la Marcha Mundial de Mujeres y otras redes amigas que están participando activamente de los cambios que precisan nuestras sociedades por justicia y dignidad para las mayorías.

Movilízate

Este 8 de marzo como cada Día de las Mujeres Trabajadoras llamamos a nuestras organizaciones miembros, aliadas y amigxs a conspirar desde todos los espacios donde estemos: en nuestras comunidades, calles, plazas, mercados, escuelas y trabajos, cuidando de la vida, sigamos denunciando y movilizando conciencias, presionando para que los Estados se comprometan con las luchas históricas de las mujeres de los campos y las ciudades.

¡Contra el virus del patriarcado y el capitalismo. La vacuna: el feminismo y la solidaridad!